Alimentación y salud, Recetas
¿Te imaginas hacer un capricho de chocolate sin horno? Pues la receta es muy fácil y nosotros te la explicamos, solo necesitas dos minutos y tu pasta de fruto secos Amandín favorita!
1 comensal. <10min. Dificultad baja
Ingredientes:
- 3 cucharadas de crema de Almendras Amandin
- 60ml de leche o bebida vegetal Amandin
- 1 huevo mediano o grande
- 3 cucharadas de harina integral
- 3 cucharadas de cacao puro
- 1 cucharada de levadura
- Endulzante al gusto (opcional)
- 25g de avellanas (topping)
Elaboración:
- Preparamos una taza apta para microondas y le añadimos 3 cucharadas de crema de Almendras Amandin, la leche o bebida vegetal y el huevo. Lo mezclamos todo bien con un tenedor.
- Añadimos la harina integral, el cacao y la levadura, y seguimos mezclando hasta lograr una masa homogénea. Añadir el endulzante al gusto.
- Colocamos la taza en el microondas a 800w durante 1 minuto y medio (aseguráte de que queda un tercio sin rellenar, aprox. 3 cm hasta el borde).
- Mientrastanto, troceamos las avellanas para añadirlas posteriormente como topping.
- Una vez transcurrido el tiempo, dejamos reposar el mug cake dentro del microondas unos 5 minutos antes añadirle las avellanas y poder disfrutar de él.
Receta de @beliklein
Alimentación y salud, Recetas
Si quieres un batido diferente a los típicos de proteínas, te proponemos incluir ingredientes naturales y vegetales, para que sea más rico y saludable!. Incorporando también una fruta como el plátano, te ayudará a tu recuperación después del entreno.
1 comensal. 5min. Dificultad baja
Ingredientes:
- 250ml bebida vegetal
- 30g de copos de avena (4 cucharadas)
- 3 cucharadas de Crema de Anacardo Amandín
- 1 plátano
- Chocolate negro (al gusto)
- Pistachos (al gusto)
Elaboración:
- Añadimos al vaso la bebida vegetal, los copos de avena, el plátano y la crema de anacardo Amandín.
- Lo trituramos todo hasta obtener una masa homogénea y le añadimos al gusto chocolate negro fundido y/o a onzas, así como unos pistachos.
- Mezclamos de nuevo y le añadimos la pajita. ¡Disfruta de tu batido proteico recuperador!
Tips:
– Necesitarás: una batidora.
Receta de @beliklein
Alimentación y salud, Recetas
El matcha no se usa solamente en infusión, sino que con el puedes elaborar postres, helados, batidos…Te proponemos nuestro matcha vegetal: delicioso, perfecto para el calor debido a su sabor refrescante y… facilísimo!!
1 comensal. 5min. Dificultad baja
Ingredientes:
Elaboración:
- Preparamos un bol con el colador y le añadimos 10g de té matcha (reservamos un poco para el último paso). Lo suavizamos con la ayuda de una cuchara.
- Añadimos 75ml de agua hirviendo y lo batimos bien hasta que el matcha se disuelva completamente. Reservamos.
- Ponemos el hielo picado en una taza y añadimos 150ml de bebida de avena barista Amandín. Ayúdate del espumador batila y darle consistencia.
- Añadimos el té matcha reservado y lo mezclamos bien todo.
- Finalmente añadimos el edulcorante que prefiramos y espolvoreamos con el té matcha que hemos reservado en el primer paso.
- ¡Disfruta de tu matcha latte frappé con avena barista!
Tips:
– Necesitarás: un colador y un espumador eléctrico.
Receta de @beliklein
Alimentación y salud, Recetas
Rico en antioxidantes, vitaminas y calcio! Smoothie de frutos rojos, con arándanos, moras y frambuesas. Una bebida para recargar energía, que puedes preparar muy fácil en casa.
1 comensal (1 u.) 5min. Dificultad baja
Ingredientes:
Elaboración:
Añadimos los ingredientes a la batidora (reservamos 25g de fruta de toppings) y los trituramos hasta conseguir que la masa sea cremosa.
Sírvelo en un bol y decóralo con la fruta que habíamos reservado. ¡Buen provecho!
Tips:
– Si quieres lograr una masa más dulce puedes añadir 4 gotitas de estevia.
– Si quieres hacer helados en vez de un smoothie puedes meterlo al congelador y esperar dos o tres horas.
Receta de @beliklein
Alimentación y salud
“A nadie le amarga un dulce”, dice el refrán. Y aunque es totalmente cierto, también lo es que actualmente la mayoría de nosotros tomamos una cantidad excesiva de azúcares. Por eso, si quieres tomar menos azúcar, pero no sabes por dónde empezar, este artículo es para ti.
¿Todos los azúcares son el enemigo?
¡No! Antes que nada, es necesario saber qué azúcares son los perjudiciales. Lo son los azúcares llamados “libres”, e incluyen:
- Los añadidos en el momento de cocinar o preparar un alimento (blanco, moreno, panela…)
- La miel y las melazas
- Siropes y jarabes endulzantes
- Incluso el azúcar que contienen los zumos de frutas, aunque sean naturales (Organización Mundial de la Salud, 2015).
Por lo tanto, habrá que reducir el consumo de todas estas fuentes de azúcares sencillos, y no solo el azúcar blanco. ¿Qué otros azúcares no son perjudiciales ni debemos plantearnos reducir? Los que contienen las frutas frescas enteras, las hortalizas y la leche (si es que la tomas).
¿Cómo reducir el azúcar?
La teoría está muy bien, pero hay que pasar a la acción. Vamos con 5 ideas, ¿se te ocurre alguna más?
1. Disminuye progresivamente el azúcar que añades a comidas y bebidas
Hay que acostumbrar al paladar. Si sueles añadir azúcar a tus comidas (la miel y el agave también cuentan), lo mejor es que vayas reduciendo la cantidad poco a poco. ¡No se trata de sufrir! Verás como poco a poco necesitarás menos cantidad, hasta que puedas eliminarla del todo.
2. Cambia los zumos por fruta fresca
La mejor manera de aprovechar los beneficios de la fruta es comerla fresca. Evita zumos, licuados, o smoothies en tu día a día. El cuerpo no asimila igual el azúcar de una pieza de fruta fresca -con su fibra, su tiempo para masticarla, disfrutarla y tragarla-, que un vaso de zumo (con el azúcar de 3-4 piezas de fruta, sin la fibra ni la pulpa). ¡Por más natural que sea!
3. Lee las etiquetas de los productos y busca opciones 0% azúcares
Cuando un producto es 0% azúcares, significa que ni se le han añadido azúcares, ni los contiene de forma natural, como nuestras bebidas vegetales 0% azúcares. ¿Las has probado ya? Otra frase que puedes buscar es “sin azúcares añadidos”, ¡pero vigila! Una miel o un zumo de fruta puede no contener azúcar añadido, pero ya sabemos que sus azúcares siguen estando presentes.
4. Cambia alimentos ricos en azúcar por opciones más saludables
¿Chocolate? Busca uno con un alto porcentaje de cacao, así contendrá menos azúcar. ¿Picoteo dulce? Opta por la fruta fresca, o incluso la fruta seca (ciruelas, orejones). ¿El azúcar de tu yogur o alternativa vegetal? Dale un toque de canela. ¿Mermelada en tus tostadas? Prueba a usar compota de manzana casera sin azúcar.
5. Endulza las recetas con fruta o fruta deshidratada
Orejones, dátiles, un plátano maduro chafado, manzana asada… Sí, ya sabemos que no es fruta fresca y entera. No obstante, sigue siendo una mejor opción que añadir azúcar, o alimentos ricos en este ingrediente, a un yogur, una tortita, o como ingrediente en una receta. La fibra que aportan ayudará a compensar un poco la presencia de azúcares, y ralentizará su absorción en el cuerpo.
Lo estás haciendo bien…
Incluso si sigues añadiendo esa cucharadita ocasionalmente a tu comida o bebida, o comes una porción de ese pastel de cumpleaños hecho con amor (¡y azúcar!), o compartes un helado en familia, o disfrutas de un zumo natural con tu desayuno del domingo. Lo importante es lo que haces de manera habitual y repetida en tu día a día.
Recuerda, esto no es un “todo o nada”. Actualmente, se recomienda limitar al máximo el consumo de azúcares libres, incluyendo los añadidos (Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria, 2022) sin embargo, la OMS apuntó con anterioridad a un límite máximo de hasta 25 g de azúcares libres al día. ¡Ojo! No es una invitación a consumirlos, es una cantidad aproximada que no debemos sobrepasar. ¿Te animas tú también a consumir menos azúcar?
Alimentación y salud, INside Amandín
¿Podemos denominar alimentos ecológicos a los bio u orgánicos?.
Dichos términos son iguales, según el reglamento europeo sobre producción ecológica. Lo importante es comprobar su certificación.
Hoy nos preocupa el medioambiente y la salud. El mercado “Eco” y sus productos se encuentran ya en el pequeño comercio y en el gran supermercado. Hay cierta confusión debido al etiquetaje que, en ocasiones, mezcla términos como eco, bio, natural, sano, sostenible u orgánico junto a iconos “verdes”, generando desconfianza.
La reglamentación europea rige las normas de la producción ecológica
Un producto ecológico está vinculado a la agricultura y la transformación, ambos regulados por un pliegue de condiciones establecido por la Unión Europea bajo el reglamento 2007/834 (https://eur-lex.europa.eu/legal-content/ES/ALL/?uri=CELEX%3A32007R0834). Determina las normas que rigen las prácticas agrícolas ecológicas, el procesamiento y etiquetado de alimentos ecológicos y permite otorgar un certificado a través del sello de la hoja verde (ver logo abajo).
En España, cada comunidad tiene sus propios organismos de control para garantizar que se respeten las condiciones del reglamento, y pueden atribuir también un sello específico que aporte las mismas garantías que la hoja verde Europea (CCPAE en Cataluña (http://www.ccpae.org) o CAAE en Andalucía (https://www.caae.es), por ejemplo).
El reglamento europeo y/o los organismos referentes en España, no atribuyen diferencias entre los términos “eco”, “orgánico” o “bio”, siendo la certificación obtenida lo único a lo que ceñirse.
¿Por qué dicha confusión entre bio, eco u orgánico?
Básicamente es cuestión de idioma y marketing. Cuando la reglamentación entró en vigor, países precursores como Inglaterra se apropiaron del término “organic”. Suiza hizo lo mismo con el término “bio” (por “biologique”, en francés). Ambos adaptables a nuestro idioma, “orgánico” y “biológico”, se extendieron por España hasta que se determinó la definición de alimento ecológico o eco como el más apropiado para usar actualmente en castellano.
¿A qué se refiere un producto ecológico?
Las normas y regulación en la producción ecológica prohíben y garantizan prácticas orientadas a proteger el medio ambiente, sus ciclos naturales y el bienestar animal. No se pronuncia claramente respecto a los beneficios para la salud humana, aunque son frecuentes estudios científicos que los avalan.
Desde el inicio, la producción ecológica quiso ir más allá del simple respeto de esas prácticas. Tuvo la voluntad de crear un ecosistema holístico que interconecte, proteja y favorezca tanto a seres humanos, plantas o animales, con el objetivo de garantizar la regeneración de los recursos naturales en el futuro.
¿Qué criterios aplica la producción ecológica para definir un alimento ecológico?:
Por norma, están prohibidos:
Fertilizantes, pesticidas, aromas o colorantes de síntesis artificiales.
Organismos genéticamente modificados (transgénicos).
Por norma, garantizan:
Una mejora del bienestar animal (más espacio, acceso al aire libre, alimentación ecológica, etc.).
Rotación de cultivos.
Por norma, se reconoce que la agricultura ecológica:
Favorece la biodiversidad.
Conserva los recursos naturales (tierra, agua, aire), limita sus usos y protege de la contaminación.
Mantiene la diversidad genética.
Persigue una cadena de valor más justa.
En nuestra web (www.amandin.com) se encuentra fácilmente el sello de la hoja verde Europea en la ficha de todos nuestros productos, así como los sellos “Sin gluten”, “Vegan” (https://www.v-label.eu/es/v-label) o “UTZ” (https://www.rainforest-alliance.org/es/utz/) (cacao sostenible), si corresponde. +Info: https://amandin.com/amandin-life/
El correcto etiquetado de productos ecológicos es clave, así como la definición de alimento ecológico o eco. ¡Estad atent@s!. También podéis leer este post para aclarar más dudas https://amandin.com/que-sabes-del-etiquetado-nutricional/