Su blog de recetas veganas nos apasiona; no tan sólo por las recetas que prepara sino también por su diseño: estética muy cuidada, colores limpios, estructura ordenada y unas fotos increíbles; con tan sólo verlas te entran ganas de preparar todas las recetas.
Se nota que a Aida le apasiona la cocina y su blog. Prueba de ello es que acaba de editar un libro con las recetas de su blog al que ha puesto el nombre de Recetas veganas ilustradas. Un proyecto donde las recetas toman vida gracias a las ilustraciones que las acompañan.
- Tu nombre real
Aida Lídice Lueje Sueiras
- A qué te dedicas en tu día a día
Soy publicista y ahora mismo trabajo en Marketing Online
- Desde cuando te interesas por la cocina
Desde muy pequeña empecé a cocinar con mis abuelas, sobre todo repostería que era lo que más me gustaba. Cuando me fui a estudiar fuera empecé realmente a ponerlo en práctica y dar el “salto” a lo salado.
- Tu ingrediente favorito
El aceite de oliva. Aunque sea con un poco de pan, si el aceite es bueno, ya tienes un platazo.
- Tu plato favorito
La paella o el rissotto, los arroces en general.
- ¿Cuándo empezaste el blog?
Comencé con el blog en 2012. Tiene ya tres años que han pasado muy rápido y en los que he aprendido cantidad de cosas y conocido a un montón de personas que merecen la pena. La verdad es que estoy muy agradecida por todo ello.
- ¿Tienes algún cocinero de referencia? ¿A quién admiras?
El primer libro de cocina vegana que tuve fue el de Toni Rodriguez, así que se puede decir que fue mi inspiración y referente. Aún así tengo que reconocer que aprendí mucho de cocina viendo con mis abuelas a Karlos Arguiñano y que hoy en día alucino con los postres de Jordi Roca.
- ¿Desayunas? ¿Qué desayunas?
Siempre, es la comida del día que más disfruto. Suelo tomar un zumo, tostadas o cereales y algún fruto seco, aunque por el fin de semana a veces me doy un capricho dulce con alguna galleta o bizcocho casero.
- ¿Té o café?
Té, tomo varios al día y me gustan casi todos los tipos de infusiones. Eso sí, hay días en los que no me puedo resistir a un café con leche vegetal por las mañanas o a un café con hielo en alguna terraza bajo el sol.